Foto: COPE.
La Diócesis de Lugo, en colaboración con la Xunta de Galicia, ha completado la instalación de rejas e iluminación en iglesias situadas en el Camino, colocados para facilitar que peregrinos y vecinos puedan ver su interior incluso estando cerradas.
En el Camino Primitivo están colocados estos mecanismos en las iglesias de Santiago da Fontaneira y Santa María en A Fonsagrada; San Lázaro da Ponte y San Miguel de Bacurín en Lugo; San Román da Retorta en Guntín; San Xurxo de Augas Santas en Palas de Rei; Santo Estevo de Vilamor en Toques y Santa María de Vilabade en Castroverde.
En el Camino Francés pueden verse en la iglesia de Santa María de Montán en Samos; en la de Santa María de Ferreiroas en Paradela; en la de Triacastela y en la de San Nicolás de Portomarín.
También se intervino en San Xoán do Sixto, en el ayuntamiento de Dozón; en San Miguel de Montefurado, en San Salvador do Hospital y en Santa María de Vilaster y Bendilló, en el ayuntamiento de Quiroga; en Santa Mariña de Barxa do Lor, en Pobra do Brollón; en San Salvador de Vilasante y San Lourenzo do Fión, en el ayuntamiento de O Saviñao y en la chantadina de San Pedro de Líncora.
Poner en valor el patrimonio
La Diócesis es consciente de la importancia de esta ruta de peregrinación, y de hecho es la diócesis española con más kilómetros de rutas xacobeas, y está comprometida en la atención a las personas que por diversos motivos realizan el Camino de Santiago, a la vez que intenta poner en valor el rico patrimonio con el que cuenta.
