La colaboración entre la Xunta de Galicia y la Diócesis de Lugo ha permitido la instalación de rejas e iluminación en casi una veintena de iglesias situadas en el Camino de Santiago. Esta medida facilita la visión del interior de los templos y la atención al público, mejorando la experiencia de los peregrinos que transitan por las rutas jacobeas. Asimismo, desde la delegación de Patrimonio se recalca que con la instalación de las rejas se beneficia la ventilación de muchos de estos templos, lo que supone hacer una conservación preventiva de los mismos, a la vez que se aprovecha para reforzar las puertas y la seguridad.
El delegado de Liturgia Religiosidad Popular y Patrimonio Histórico Artístico, José Antonio Ferreiro y el director del Departamento de Patrimonio, Jesús Salvador, recibieron al director de Turismo de Galicia, Xosé Merelles, y al delegado territorial de la Xunta en Lugo, Javier Árias, en su visita a la iglesia de A Ponte de San Lázaro, una de las beneficiadas por esta colaboración.
En el Camino Primitivo se ha intervenido en las iglesias de San Tomé de Souto de Torres (Castroverde), Santa María de Bascuas, Santa Eulalia de Bóveda y San Lázaro da Ponte (Lugo), así como en San Salvador de Merlán (Palas de Rei) y Santa María de A Fonsagrada (A Fonsagrada).
En el Camino de Invierno la colaboración permite visitar las iglesias de San Pedro de Cereixa (A Pobra do Brollón), San Salvador de Moreda (Monforte de Lemos), San Miguel de Montefurado (Quiroga) y San Clodio (Ribas de Sil).
En el Camino Francés, se incluyen las iglesias de Santa María de Castromaior y San Nicolás (Portomarín), Santiago de Ligonde (Monterroso), Santa Mariña (Sarria) y Santa María A Real (O Cebreiro).
En el Camino del Norte las iglesias beneficiadas son San Paio de Seixón y Santiago de Miraz, ambas en Friol.
Maria José Campo